Tan negro como el gris.
"Mis alas no dependen de tus brazos".
O eso decía.
.jpg)
Entonces supe que él no estaría más.
Porque así hubo de haber sido. Sabía que ese momento había sido creado para destruirse varias miradas después. Él también lo supo, y sin embargo, no titubeó un solo instante al regalarme un último atisbo de luz de su iris. E intenté no volver a respirar.
Aún hoy en las noches frías me pregunto si habrá vuelto a mirar a alguien así. No siento rabia, ira ni celos. Quizás solo un poco de dolor. Quizás porque puede que haya sido la última vez.
Su pupila dilatada, siempre seguirá en mi presente.
'Los ojos encharcados de un alma hecha trizas.'
Comentarios
Publicar un comentario